La semana pasada tuvo lugar en la Pontificia Universidad Católica de Sao Paulo, Brasil, el Sexto Encuentro Internacional del Foro Paulo Freire, con el tema "Globalización, educación y movimientos sociales: 40 años de la pedagogía del oprimido". Éste es uno de los libros más divulgados en el ámbito educativo mundial, al contar con innumerables ediciones y haber sido traducido a más de 40 idiomas. En el encuentro, se congregaron especialistas en la obra freiriana provenientes de varios lugares del mundo, así como los directores de los Institutos Paulo Freire ubicados en diversas ciudades de América, Europa, Asia y África. A diferencia de la mayoría de los eventos académicos internacionales, el Sexto Encuentro tuvo un formato novedoso y ágil conformado por conferencias, círculos de cultura y actividades artísticas. Siguiendo el espíritu de la obra de Paulo Freire, este tipo de encuentros internacionales (con periodicidad bienal) constituyen momentos para la reflexión sistemática y conjunta de las intervenciones e investigaciones que se realizan en contextos diferentes alrededor de la educación ciudadana, la educación de adultos, la educación popular y la ciudadanía planetaria.

Una de las iniciativas más relevantes presentadas en este encuentro internacional fue el relanzamiento de la Universidad Paulo Freire (Unifreire), creada en la reunión de Bolonia del año 2000. Se trata de una concepción muy novedosa de universidad que se construye a partir de una red de núcleos localizados por todo el planeta y vinculados entre sí por el espíritu del legado freiriano, aprovechando los modernos medios de comunicación para desarrollar programas y proyectos que promuevan la liberación de los oprimidos.

Una de las metas de esta iniciativa es recuperar el carácter de la universitas creada por los estudiantes de Bolonia y tratar de neutralizar el corporativismo que distingue a las universidades actuales.

Asimismo, uno de sus principios cardinales es que la información y el conocimiento constituyen un derecho humano fundamental, pues sin su cumplimiento es imposible el proceso de “concientización” y el acceso a otras conquistas sociales de nuestra época.

Centrada en el aprendizaje más que en la enseñanza, la Unifreire está determinada a seguir los principios de que el aprender precede al enseñar y la enseñanza se diluye en la experiencia fundamental del aprendizaje. Asimismo, no se enseñarán sólo contenidos, sino a aprender, es decir, a pensar con certeza. Pensar con certeza es estar siempre en duda con las propias certezas a partir de la observación del mundo. En este mismo orden de ideas, la curiosidad ingenua habrá de ser sustituida por la curiosidad epistemológica.

La perspectiva de la Unifreire respecto de las condiciones de estudio y formación contempla las posibilidades que pueden generarse mediante la utilización de los recursos mediáticos actuales, más que en la construcción de locales fijos.

De esa manera, se pretende que la consolidación de la Unifreire como gran centro de investigación y formación esté dada por su capacidad de articulación y movilización de personas con gran potencial de trabajo y competencia intelectual en torno a sus proyectos.

La red freiriana de educadores está formada por personas que integran los espacios más importantes en la lucha social y la producción de saberes en el mundo. Ello significa que si bien los recursos materiales de operacionalización de la Unifreire son limitados, existe por otro lado, un enorme potencial humano de trabajo y conocimiento.

Se pretende, entonces, que la Unifreire sea una universidad internacional creada para el desarrollo de las personas e instituciones que luchan por la justicia, la paz y la sustentabilidad, solidarizándose y luchando por la causa de los oprimidos. Es un proyecto que se constituye como un centro articulador, transnacional, configurado por la utilización educativa del espacio virtual y presencial, donde la información y el conocimiento se orientan por los ideales y la ética freirianos, pero también fundamentados en el rigor científico y la radicalidad de la democratización del saber.

La aspiración inmediata es configurar una red en autoconstrucción, promotora de una inteligencia colectiva, así como una comunidad virtual desterritorializada y articulada para la producción y difusión del conocimiento mediante nuevas formas de leer e intervenir en el mundo. De esta forma, la Unifreire ocupa un espacio público no estatal, lo que sería en términos habermasianos, una esfera pública ciudadana en la que se conectan grupos, redes y movimientos.

Lejos de ser una utopía, esta interesante iniciativa promovida por la red de Institutos Paulo Freire es hoy perfectamente posible y así lo entienden sus impulsores. La amplia disponibilidad de plataformas para el aprendizaje, así como la conectividad y el crecimiento casi ilimitados de las redes, hacen que la consolidación de la Unifreire esté al alcance de la mano. Una propuesta como ésta, que contempla la democratización del conocimiento en su más amplia expresión, merece ser apoyada y difundida.