A Cristina
Aparte de los sistemas universitarios privados de cobertura nacional, entre los cuales hemos comentado los casos del ITESM, la UVM y el Tec-Milenio, y de los sistemas universitarios privados regionales, de los cuales nos ocupamos la semana pasada, está el caso de las universidades católicas, las cuales también han desarrollado dinámicas de expansión territorial y de integración sistémica mediante la creación de sedes descentralizadas en ciudades fuera de la capital de la República y a través de la formación de redes institucionales.
La Compañía de Jesús fundó en 1943 el Centro Cultural Universitario (CCU) con una Escuela de Filosofía y Letras incorporada a la UNAM. El CCU tuvo vigencia hasta 1952 y dio paso, a partir del año siguiente, a la actual Universidad Iberoamericana (UIA). También en 1952 inició sus operaciones una segunda universidad jesuita: el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), en la ciudad de Guadalajara. En 1978 se estableció la primera unidad descentralizada de la UIA: la Universidad Iberoamericana de León (Guanajuato), y poco después las sedes UIA de Tijuana (1982), Torreón (1982) y Puebla (1983). En 1993, en Acapulco, fue fundada la Universidad Loyola del Pacífico, independiente de la UIA pero afiliada a la red mexicana de universidades jesuitas. Por último, en 2006 se inauguró el Centro de Estudios Ayuuk (CEA), en el municipio de Jaltepec de Candayoc (Oaxaca), nuevo proyecto intercultural de la orden, cuyo objetivo consiste en ofrecer una opción de formación profesional para las y los jóvenes del territorio ayuuk y municipios circundantes, que les permita integrarse con éxito a la vida productiva de su comunidad y su región.
La red de universidades Anáhuac, afiliadas a la Legión de Cristo, se inició con la creación en 1964 de la primera Universidad Anáhuac, la cual establecía continuidad académica con el Instituto Cumbres (1953), primera institución educativa de la congregación. En 1981 se fundó una primera extensión de la UA también en la Ciudad de México: la Universidad Anáhuac del Sur. En 1984 se estableció una primera sede descentralizada, la Universidad del Mayab, en Mérida, Yucatán; en 1993 se fundó la Universidad Anáhuac de Xalapa (Veracruz), y durante la primera década de este siglo se constituyó la red con varias nuevas unidades en distitntos puntos del país: la Anáhuac de Cancún (2000), la de Oaxaca (2000), la de Puebla (2003), la de Querétaro (2005) y el Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas (Tampico, 2005).
Además de la descentralización en México, la legión ha desarrollado un notable proceso de expansión internacional mediante la fundación de unidades fuera del país. En este renglón cabe mencionar las siguientes instituciones: la Universidad de Sacramento y el Instituto de Ciencias Psicológicas, ambas en Estados Unidos; la Universidad Francisco de Vitoria (España); el Instituto de Gerencia de París (Francia); la Universidad Europea de Roma y el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum, ambas en Italia, y la Universidad Finis Terrae de Chile, la cual fue incorporada a la congregación en 1999, aunque operaba como universidad privada católica independiente desde la década de los años ochenta.
La Congregación de los Hermanos Maristas, orden fundada en Francia en el siglo XIX por el padre Marcelino Champagnat, cuenta en México con cinco universidades. La Universidad Marista de México (DF) tiene como antecedente el Centro Universitario México División de Estudios Superiores (CUMDES), cuya primera licenciatura se inició en 1993. El CUMDES adquirió el nombre de Universidad Marista de México en 2002. También forman parte de la red marista la Universidad de Monterrey, establecida en 1969 en la capital de Nuevo León, así como las universidades maristas de Guadalajara (1990), San Luis Potosí (1993), Mérida (1996), Querétaro (1996) y Nayarit (2006). Además, la red mexicana forma parte de una amplia estructura de universidades maristas que comprende varios países.
Los Hermanos de las Escuelas Cristianas, reconocidos por su obra educativa en torno al ideario de Juan Bautista de La Salle, no son una orden religiosa tradicional, pero sí una congregación católica laica reconocida, desde el siglo XVIII, como una sociedad de vida apostálica, y bajo ese régimen las instituciones educativas de la congregación tienen la calidad de institutos de vida consagrada. La primera universidad lasallista en México se fundó en 1962 con la denominación Universidad de La Salle, a partir de la preparatoria del Colegio Cristóbal Colón.
En la actualidad, la red de IES lasallistas relacionadas con la congregación incluye a las siguientes universidades: La Salle Bajío (Guanajuato, León, 1973; San Francisco del Rincón, 1987, y Salamanca, 1988); La Salle Morelia (Michoacán, 1991); La Salle Noroeste (Obregón, Sonora, 1991); La Salle Cuernavaca (Morelos, 1991); La Salle Cancún (Quintana Roo, 1991); La Salle Pachuca (Hidalgo, 1994); La Salle Laguna (Gómez Palacio, Durango, 1997); La Salle Chihuahua (1999); La Salle Ciudad Victoria (Tamaulipas, 2001); La Salle Saltillo (Coahuila, 2004), y la Universidad La Salle Benavente, antes Normal Superior Benavente (Puebla, 1999).
A la Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei, fundada en España en 1928 por Josemaría Escrivá de Balaguer, corresponden la Universidad Panamericana, creada en 1968 en México, DF, como Instituto Panamericano de Humanidades, la Universidad Panamericana de Guadalajara (1981) y la Universidad Bonaterra (Aguascalientes, 1995).